Altolaguirre recalculando: sin tanto Cambio en Cambiemos
Las actitudes lindantes con el autoritarismo que suele exhibir el intendente Leandro Altolaguirre generaron situaciones de malestar en su propio partido (Cambiemos), a partir de los cambios de funcionarios que aplicó apenas pasadas las PASO.
Sabido es que el intendente y su hermano presidente de la UCR, Hipólito, pusieron todas sus fichas a favor de la precandidatura de Martín Berhongaray. Se jactaban de haberse puesto los pantalones largos y arruinar un supuesto pacto entre los radicales azules y el PRO, mediante el cual el “candidato de la unidad” debía ser Francisco Torroba. Encuestas mediantes –una de las grandes perdedoras de las PASO- presentaron batalla y arremetieron con todo contra el ex jefe comunal, pero olvidaron que había un tercer candidato en esa alianza (Martín Maquieyra) que finalmente terminó aprovechando el error de cálculo de los radicales y se quedó con la contienda.
Haciendo gala de uno de sus habituales arrebatos, Leandro Altolaguirre decidió aplicar ejemplificadores cambios en su nómina de funcionarios y atacó la yugular de las terceras líneas identificadas con el torrobismo y con algunos incondicionales del macrismo pampeano.
La jugada no cayó para nada bien entre los integrantes del gabinete municipal, principalmente en el área de Hacienda y Presupuesto, cuyo titular –Luis Evangelista- y gran parte de su equipo votaron a Torroba. Idéntica situación se vivió en el Concejo Deliberante, donde hay ediles y funcionarios encolumnados detrás de las banderas azules.
Idéntico malestar hubo en las huestes del macrismo local. Dicen que a venían tirantes las relaciones entre el intendente y el secretario de Deportes de la Nación, Carlos Mac Allister. Una muestra de ello fue la falta de acuerdo en hacer un mega festejo del Día del Niño y la Municipalidad terminó celebrando el 6 de agosto, mientras que el macrismo lo hará el próximo domingo.
El primero en percatarse y recibir la andanada de críticas habría sido Hipólito, quién aconsejó fraternalmente a Leandro levantar el pie del acelerador y parece que por ahora quedarían en Stand By algunos cambios programados por el lord mayor. Sería por esta razón que las eyecciones de funcionarios como Élida Deanna quedarían suspendidos, al menos por ahora.
Prudente, el presidente de la UCR gestionó una reunión de una mesa que raudamente saliera a apoyar al candidato que encabezará la nómina de Cambiemos, más aún teniendo en cuenta que la número dos de la lista es del sector que ellos apoyaron. Intentando mostrar algo de rebeldía, Leandro Altolaguirre se puso tan al costado de la foto, que casi se queda afuera.
Menuda tarea enfrenta el tocayo del “Peludo Iluminado”, por un lado calmar a su hermano y por el otro a los afiliados que le apuntan a la conducción partidaria que el único cabeza de lista radical, Juan Carlos Passo, vaya en la nómina de otra fuerza.