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¿Todos unidos triunfaremos?

Si bien referentes de todas las líneas internas del Justicialismo pampeano reconocen como el actual conductor al gobernador Carlos Verna, en la práctica algunos parecen esmerarse en demostrar lo contrario.

En la última semana se sucedieron dos hechos que directamente aparentan buscar el límite de la paciencia del barbado mandatario.

La primera en dar muestras de haber elegido el camino de la confrontación con la administración provincial es la diputada del Bloque Justicialista Lucrecia Barruti. La legisladora no dudó en estampar su firma a los duros y cuestionadores documentos que redactaron un grupo de políticos achenses, encabezados por la intendenta Maria Julia Arrarás, poniendo en tela de juicio la decisión gubernamental de conectar el acuífero del Valle Argentino al Acueducto del Río Colorado, para no dejar sin agua a Santa Rosa y localidades cercanas, cuando se corta el suministro por reparaciones.

La causa se ha transformado ya en un hecho político, puesto que la legislación vigente marca que los recursos subterráneos son de la provincia y no de los municipios. Los últimos escritos emanados de la sureña localidad han ido subiendo de tono y lo que en principio surgió como una crítica al gobierno, se ha transformado directamente en cuestionamientos al criterio del gobernador.

Barruti suscribió cada uno de los comunicados. La actitud de la diputada, que llegó en la lista de la jorgista Compromiso Peronista, ya ha generado desconfianza y miradas de reojo, tanto entre sus colegas del bloque, como así también de varios de los funcionarios provinciales que acostumbran a recibirla, ante sus promesas de lealtad al gobierno provincial.

Rebelión naranja en el oeste

En la localidad de Telén se produjo otro hecho político, que algunos coinciden en señalar como una provocación al discurso de unidad que todos se esmeran en marcar como la realidad del PJ vernáculo.

Allí gobierno un reconocido dirigente camporista, Saúl Etcheveste, pero que no escatima muestras de respeto y simpatía hacia Carlos Verna. De hecho, allegados a los altos círculos de poder coinciden en que Verna tiene simpatía por el más joven de los intendentes pampeanos.

En Telén, el gobierno municipal justicialista perdió la presidencia del Concejo Deliberante local, luego de que una edila del PJ acordara con el PRO y dejara en minoría al oficialismo.

Más allá de este hecho desencadenante, no pasa desapercibido que la concejala llegó a su cargo como candidata de la vernista  línea Plural y hoy se reconoce como referente de la marinista Convergencia Peronista. Es más, en una radio local se referenció directamente con el diputado Espartaco Marín, presidente del bloque oficialista de la Legislatura Provincial.

En las charlas de pasillo no llamó tanto la atención de que el oficialismo telenense quedara en minoría, puesto que pasó lo mismo con los dos intendentes anteriores a Etcheveste, sino que Convergencia le birlara una concejala a la Plural.

Como se ve, los mensajes de unidad y encolumnamiento detrás de la autoridad del gobernador abundan en los referentes de todas las líneas, pero al momento de demostrarlo no siempre se nota.