Detuvieron al autor de la amenaza de bomba en el recital de Lali Espósito en San Juan

La Policía de San Juan identificó y detuvo a Juan Carlos Salem, un hombre de 74 años, como autor de la amenaza de bomba que obligó a demorar el inicio del recital de Lali Espósito el pasado viernes en el Estadio Aldo Cantoni, en la ciudad capital de esa provincia.

El acusado, domiciliado en el barrio La Bebida del departamento Rivadavia, confesó haber realizado el llamado al 911 en el que aseguraba haber colocado un artefacto explosivo en el estadio. En el mensaje, se refirió de forma despectiva a la artista y expresó motivaciones ideológicas.

El operativo de seguridad obligó a revisar por completo el establecimiento. Una vez descartada la presencia de explosivos, el espectáculo comenzó cerca de las 22:30. Durante el allanamiento al domicilio de Salem, la policía secuestró un arma calibre 22, según informó el portal Diario de Cuyo.

Los fiscales Alejandro Mattar e Ignacio Achem ordenaron su detención y formularon cargos por intimidación pública. Salem fue trasladado a la Seccional 34°.

Días después del incidente, Lali Espósito se refirió al hecho en una entrevista televisiva. Relató que permaneció en el lugar mientras se realizaban las tareas de seguridad y que, al confirmarse que no existía peligro, decidió seguir adelante con la presentación.

“Yo no tengo idea cómo es un protocolo de esos. Me preguntaron si me quería ir, dije que no. Me parecía que había que esperar ahí como la gente que estaba esperando para el show también”, expresó.

La cantante también reflexionó sobre el impacto de los discursos de odio en redes sociales: “Habla de una época, de un modo que se instala. Cuando hablamos de discursos de odio es esto”.

En ese sentido, subrayó que este tipo de expresiones afectan de manera particular a mujeres y colectivos vulnerables: “Nos tocó a nosotros esta vez. Hay un montón de discursos de odio que le cagan la vida a la gente, a la comunidad LGBT”.

Espósito, que actualmente se encuentra de gira con su disco No vayas a atender cuando el demonio llama, también aludió a los agravios que ha recibido de parte del presidente Javier Milei. “No me arrepiento para nada. Creo que lo que intentan es eso, amedrentar. Yo creo en lo que digo. Estoy tranquila con mis formas”, concluyó.