
Georgieva aclara sus dichos tras ser acusada de intromisión en la política argentina
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, se vio obligada a moderar sus declaraciones tras haber expresado su respaldo al gobierno de Javier Milei y advertido que en las elecciones legislativas de octubre “no se descarrile la voluntad de cambio”. Sus palabras generaron una fuerte controversia en el país, con denuncias de injerencia por parte de la oposición.
En conferencia de prensa desde Washington, en el marco de las Reuniones de Primavera del FMI y el Banco Mundial, Georgieva intentó poner paños fríos al escándalo: “Las elecciones son para los argentinos, no para nosotros”. Aclaró que su mensaje apuntaba al Ejecutivo y no al electorado: “Muy a menudo, antes de las elecciones, los gobiernos debilitan su determinación de hacer reformas. Mi mensaje fue para el Gobierno, para que establezca el rumbo en beneficio del crecimiento de la Argentina”.
No obstante, sus declaraciones iniciales, junto con el gesto de lucir un pin con una motosierra —símbolo del ajuste promovido por la administración Milei—, fueron leídas como un respaldo explícito al oficialismo. El ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, celebró el gesto en redes sociales, afirmando: “Gracias Kristalina por lucir la motosierra en la solapa. Símbolo del equilibrio fiscal en la presidencia de Milei”.
La reacción de la oposición fue inmediata. El gobernador bonaerense Axel Kicillof calificó de “gravísima intromisión en la vida democrática” las palabras de Georgieva y cuestionó al FMI por sus “recetas de ajuste que empobrecieron a millones”. Por su parte, Cristina Fernández de Kirchner sostuvo que Georgieva “pidió votar a los candidatos de Milei” y denunció que “pretenden someter la decisión del pueblo argentino a un organismo extranjero”.
Apenas una semana antes, el FMI había aprobado un nuevo desembolso por 12.000 millones de dólares como parte de un acuerdo por 20.000 millones, que permitió al Gobierno flexibilizar el cepo cambiario. Durante la conferencia, Georgieva elogió la política económica libertaria: “Argentina ha demostrado que esta vez es diferente”, afirmó, y agregó: “El Estado está saliendo de donde no corresponde, para permitir más dinamismo en el sector privado”.
El respaldo del Fondo al plan de ajuste de Milei y su involucramiento en el proceso político interno reavivaron viejos cuestionamientos sobre el rol del FMI en la Argentina y su relación con los gobiernos de turno.