Diario la Campana

Diario online

La gente es mala…y comenta

Terminó enero y febrero ya comienza a mostrar algunos movimientos políticos, tendientes a tomar posición para las elecciones del año entrante. Otros prefieren ceñirse al conocido refrán de que “no por mucho madrugar amanece más temprano”.

Entre los primeros hay un ex intendente que quiere volver a serlo, pero de otra ciudad a la que lo tuvo como su autoridad máxima.

El hombre viene manteniendo reuniones desde el año pasado con referentes vecinales de la capital pampea y a todos los asegura lo mismo: “Voy a ser intendente de Santa Rosa”.

Sus allegados lo ven convencido que con la mala gestión de Leandro Altolaguirre –y su antecesor, Luis Larrañaga- se terminará con aquello de que los santarroseños  votan para intendente solamente a profesionales universitarios, nacidos y criados en esta capital, y que tengan apellido de raigambre en esta ciudad.

Dicen las malas lenguas que ya tendría cercanía con una funcionaria provincial. El cargo de la mujer no es de rango alto, pero si la función para la que convocaron, puesto que era una especie de embudo, desde lo social. En un momento muchos la ubicaron a la morocha fémina en la grilla de nombres con aspiraciones a ocupar el principal sillón de la intendencia, pero parece que la principal autoridad de ese Ministerio ya eligió a un hombre para que salga al ruedo por la jefatura comunal capitalina, a juzgar por el profuso material fotográfico que circula en las comunicaciones oficiales y redes sociales.

Los cierto es que el verborrágico aspirante solo consiguió hasta el momento a un simpático y rosado mamífero para su foto de campaña. Parece que su destino está atado a esos animales, y debe ser por eso que su slogan propone a los atribulados santarroseños sacarlos “del chiquero”.