El despojo, después del despojo
Los chicos de la Escuela Hogar de Árbol Solo participarán de la instancia nacional de Feria de Ciencias, presentando un trabajo de alto contenido social, donde se solidarizan con sus pares de Colonia Emilio Mitre.
El diario digital InfoHuella publicó hoy un completo informe sobre el tema:
En la instancia nacional de Feria de Ciencias, alumnos oesteños contarán una paradójica historia sobre el despojo, después del despojo. Cuatro alumnos que integran tercer grado en la Escuela Hogar N°48 de Árbol Solo, pleno oeste pampeano, miraron hacia atrás y se solidarizaron con los niños de su misma edad, a quienes le arrebataron los derechos a la educación en Colonia Emilio Mitre.
InfoHuella accedió a la documentación del trabajo que comenzó en el aula meses atrás, y ahora se encamina para ser presentado en Córdoba.
La escuela Albergue de Árbol Solo fue creada en 1970, pero su fundación guarda un justo reclamo de la comunidad ranquel que sobrevivía a escasos 30 kilómetros, en Colonia Emilio Mitre, y pedía a gritos que ese albergue y otras obras, se construyeran en su paraje, donde había una escuela (foto) que cerró tras no concretarse las promesas de reacondicionamiento.
La maestra de tercer grado, Daniela Figueroa, visibilizó junto a sus cuatro alumnos oriundos de distintas localidad oesteñas, un hecho histórico que trascendió a nivel nacional: la comunidad ranquel gritó desde el oeste y su reclamo llegó a dos presidentes de la Nación, aunque lejos de respuestas.
Bajo el título, y haciendo honor a eso de que la memoria no se nos llene de olvido, se cuestionaron: “¿Y por qué no una escuela para ellos?”.
Los alumnos: Talía Mauril, de Limay Mahuida; Gonzalo Fiad Fuentes, de Árbol Solo; y Jazmín Pereira y Benjamín Real de Santa Isabel, reflejaron con su trabajo de Feria de Ciencias el desacierto o desidia gubernamental que en 1970 llevó a que una escuela que merecía ser construida en Colonia Emilio Mitre se levantara a unos 30 kilómetros, dejando a la comunidad ranquel despojada de la alfabetización.
“Si la mayor concentración de aborígenes estaba en Emilio Mitre: ¿por qué un albergue escolar en Árbol Solo?”, se cuestionaron los alumnos junto a la docente Daniela Figueroa.
Las hipótesis que manejaron fueron: “Se construye el albergue escolar en Árbol Solo porque este paraje cuenta con agua muy buena para consumir”. Y la otra, cruel aunque más factible, ya que el agua a la hora de construir el albergue nunca se analizó, fue: “Se construye un albergue escolar en Árbol Solo para alejar al aborigen de la escuela”.
En su investigación, los alumnos recogieron testimonios orales de pobladores de la zona. Hoy, es la Escuela Albergue la que los acobija en ese despoblado paraje que era Árbol Solo, pero con una mirada solidaria que cuestiona y mira hacia atrás, los alumnos no son ajenos a la injusta decisión de dejar sin derecho a la educación a los niños de los primeros ranqueles pampeanos que sobrevivían en Emilio Mitre.
En un recorte periodístico de la época, los alumnos encontraron un escrito de Luis Ramos Mexía, un maestro que daba clases en Emilio Mitre.
En sus fundamentos sostiene: “Acepto y aplaudo como argentino, amante y defensor de lo nuestro, la iniciativa del Gobierno de integrar a los indígenas al resto de la población, ya que el indio, toda la vida y siempre, salvo esporádicos ensayos de gobierno populares, ha estado olvidado, sumido en la miseria, el despojo y la explotación.
Pero con toda honestidad y respeto, pienso, y lo digo; de acuerdo a los derechos que la Constitución Argentina me confiere, que ésta no es una manera ideal, ni efectiva, ni viable, de apoyar al indio.
Prácticamente, el proyecto, significa fundar un nuevo pueblo. ¿Dónde? ¿A la orilla de un río? ¿A la vera de las vías férreas? ¿Al borde de rutas que comunican con importantes centros poblados? ¿Las tierras son productivas? ¿Las precipitaciones pluviales son abundantes? ¿Existen posibilidades ciertas de fuentes de trabajo? ¿Hay futuro?
Todo el que conozca el oeste pampeano y en especial la zona de Emilio Mitre y sea honesto y valiente, tendrá una única respuesta: NO”, sostuvo Mexía en un artículo publicado en julio de 1969 en el Diario La Arena.
Los ranqueles también se hicieron oír. El alambre y la amenaza de quedarse sin las tierras, hicieron que Domingo Peralta, Juan, Enrique y Gregorio Cabral, Estela Carripilón, entre otros ranqueles, enviaran una carta del presidente de la Nación Juan Carlos Onganía. Años después, también los atendió personalmente el presidente Alejandro Agustín Lanusse. El trabajo de Feria de Ciencias cuenta con un recorte periodístico que lleva el título “Indio querer Tierra”, y una fotografía donde Lanusse recibe a los ranqueles pampeanos, a quienes les prometió “las tendrán”.
Pero el reclamo de tierras, sumado al de la escuela y de un centro cívico, llegaron a oídos sordos. Según la investigación realizada por los alumnos de la Escuela 48, el gobierno decidió y concretó la construcción de una escuela albergue, plaza, correo, casa del juez de paz, cabina telefónica y destacamento policial en Árbol Solo. En Emilio Mitre, la promesa que nunca llegó fue mantener la escuela de Emilio Mitre, construir otras dos escuelas más en sus cercanías: en Médanos Negros y en un paraje llamado La Costa.
Es un trabajo de Feria de Ciencias de alumnos de la escuela hogar pampeana de Árbol Solo, que guarda en la historia de su institución un hecho histórico que viene del despojo, después del despojo.
En la actualidad, la Escuela Albergue de Árbol Solo tiene una matrícula de 19 alumnos. Sala de cuatro hasta sexto grado, con la particularidad que no hay alumnos en 2do grado. La docente Daniela Figueroa, tiene en una misma aula los alumnos de las Salas de 4 y de 5 años, más los grados 1°ro y 3°ro.
En diciembre, Daniela estará junto a sus alumnos en Córdoba, en la instancia nacional. Allí, los alumnos oesteños de nueve años, harán oír una vez más esos gritos de los ranqueles que por acá cerca, más de uno no escuchó.